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Inmersos en el impredecible e incierto
oleaje de las horas y los días,
andar la palabra: balsa invencible,
la palabra célula de donde todo brota,
decir por un fugaz instante:
la eternidad en unas sílabas.
Desenterrar las palabras-vestigios de la anatomía
de nuestra historia, la de todos, la oculta, la olvidada,
palabras como huesos de un gigante
en cuyo sueño se asoma la poesía.
Descubrir o imaginar la palabra
que vuelve posible lo impensable,
que traduce en sonido los silencios más queridos,
la palabra que es el sol en la boca,
palabras como frutas que maduran,
dulces, ácidas, jugosas,
espejismos del mundo en la cabeza,
fuegos que arden pero no queman.
Frida Mont
Bailarina mexicana nacida en la ciudad de México, reside actualmente en Xalapa, Veracruz.
Aunque desde pequeña comenzó a escribir, en un inicio a manera de diarios personales, más adelante probando con cuentos cortos y poesía, a lo que se ha dedicado durante veinte años es a la
práctica y enseñanza de la danza, misma que la llevó de vuelta a la escritura; y es hasta hace un par de años que la retoma formalmente.
Actualmente es alumna del laboratorio de eco-escritura impartido por Monica Nepote. Se considera a sí misma, poeta en formación, en busca de la propia voz.
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